Y para hacerlo de lo que realmente me importa. Porque el terror, de todos estos años ha sido principalmente el miedo a vivir. Y me he acordado que hace unos años, acogimos en Valdemoro a un grupo de compañeros y amigos que vivían amenazados por la banda terrorista, en las conversaciónes con cada uno de ellos, todos sin excepción, me mostraron la angustia que les producía que llegara el día en que sus hijos tampoco pudieran salir a comprar el periódico sin escolta, que para ir al cine siempre tuvieran a alguien sentados justo detrás no por coincidencia, que permanecieran siempre en sus casas con la luz encendida, porque siempre era de noche, al tener las persianas completamente bajadas. Debo reconocer que hasta esos días, nunca tuve tan cerca la percepción de lo que las victimas del terrorismo sentían es su día a día. Hoy en fin de semana también como aquellos días que estuvieron con nosotros, mi primer pensamiento es para Joseba, asesinado por la banda terrorista en Andoin, en 2004, justo un años después de estar aquí con nosotros. El año pasado se produjo la detención de su asesino, y ya manifeste en este mismo blog mi alegría por este hecho. Pero hoy, me alegro mucho más de que por aquello que él lucho sea una realidad, en ello confío. Volver a vivir, eso es lo importante.
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